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Obra de Serge Najjar |
Estos días de pandemia y
confinamiento han proliferado palabras y expresiones
nuevas, o se han agregado con naturalidad a la conversación pública desde jergas especializadas, para
poder así denotar realidades desprecintadas por vez primera en nuestras biografías. Por el espacio compartido desfilan covid-19, desescalada,
deshibernación del estado de alarma social, desconfinamiento, desconfinar, aplastamiento de la curva de
contagio, gel hidroalcohólico, casos asintomáticos, EPI (equipo de protección individual), microgotículas,
disnea, fluidificadores, prueba serológica, inmunidad de grupo, distanciamiento social, mascarillas FFP1, FFP2 y FFP3, teletrabajo, infoxicación, coronavirus. La propia palabra coronavirus no figura en el diccionario, aunque la comunidad científica convive con ella desde hace unos años para referirse a una numerosa familia
de virus. Es paradójico que la palabra que no está acurrucada en ninguna de las páginas del diccionario de la Real Academia sea la que más veces
abandona ahora nuestros labios. De todas las nuevas palabras de este séquito mi favorita es el neologismo infodemia
(
infodemics en inglés)
. Significa una sobreabundancia de
información que en vez de aportar claridad al asunto tratado le agrega
confusión y desconcierto. La infodemia es una pandemia de infoxicación desplegada en tiempos vírico...
* Este texto aparece íntegramente en el libro editado en papel
Acerca de nosotros mismos. Ensayos desde el confinamiento (Editorial CulBuks, 2020). Se puede adquirir
aquí.
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